Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales
La Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales está situada en la calle de Valverde, nº 22.
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Historia[ ]
Aunque puede seguirse su rastro hasta la Academia Real Mathemática, fundada en Madrid por Felipe II en 1582, dirigida por Juan de Herrera y ubicada en la Casa del Tesoro junto a la puerta de Balnadú, la actual Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, fue creada por real decreto de 25 de febrero de 1847 con sucesora de la Academia de Ciencias Naturales fundada en 1834. El 25 de diciembre de 1847 tuvo lugar la inauguración de las actividades académicas e el convento de la Trinidad, en la calle de Atocha. En 1866, el Estado adquirió la Casa de los Lujanes, en la Plaza de la Villa; edificio que adjudicó a las Reales Academias de Ciencias Morales y Políticas de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, y a la Sociedad Económica Matritense de Amigos del País. En 1897, como consecuencia del traslado de la Real Academia Española a su nueva sede (Felipe IV, número 4), la Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, ocupó la sede de aquélla, en el número 22 de la calle Valverde, donde sigue ubicada.
La Academia[ ]
La Real Academia está formada por cuarenta y dos académicos numerarios adscritos a otras tantas medallas que se distribuyen en tres secciones (Ciencias Naturales, Físico-Químicas y Naturales). Sesenta académicos, correspondientes nacionales y casi un centenar de académicos coorespondientes extranjeros completan el elenco académico encabezado por un presidente.
Entre sus actividades y posesiones destacan dos: El Vocabulario y la biblioteca. Un real decreto de abril de 1921 creaba la Junta Nacional de Bibliografía y Tecnología Científicas, con la misión de reunir, catalogar y fomentar las publicaciones científicas en lengua castellana, y cuidar, mantener y perfeccionar el tecnicismo de las ciencias. El objetivo inicial de la Junta se alcanzó en 1930 con la publicación del tomo I del Diccionario tecnológico hispano-americano; fue el primero y último tomo de este diccionario. Un decreto de abril de 1935 confirmaba labor específica de la Academia de Ciencias la prpreparación de un Vocabulario científico y técnico, cuya primera edifición fue presentada en marzo de 1984. En cuanto a la biblioteca, de libre acceso, los fondos bibliográficos existentes en 1886 se elevaban a 25.000 ejemplares. A lo largo de los años posteriores se recibieron distintas donaciones, entre las que destacan las de los académicos Mariano Lorente (dos mil volúmenes), Manuel Becerra, José Echegaray y Fernando de Castro. Tales donaciones han permitido disponer a la Real Academia de un fondo 1.088 libros antiguos (anteriores a 1801)
Referencia[ ]
Fuente de la primera versión: Artículo de la Madrid Siglo XX. Enciclopedia, autor Pedro García Barreno
