Calle de la Princesa
La calle de Princesa se encuentra entre las plazas de España y de la Moncloa. Anteriormente se llamó camino de las Cruces y del Convento de los Frailes Menores de San Bernardino y paseo de San Bernardino, por conducir al citado convento, situado donde hoy está la Residencia de Profesores.
El paseo de San Bernardino comenzaba a la salida del portillo de San Joaquín y llegaba hasta la cárcel Modelo, es decir, el tramo comprendido entre la calle de Quintana (donde se hallaba el portillo) y el edificio del Cuartel General del Aire (donde estuvo la cárcel Modelo). Cuando en 1770 se construyó el palacio de la Casa de Alba, al comienzo de esta calle, tomó el nombre de Duque de Liria hasta que, en 1852, recibió el de la Princesa, en recuerdo de María Isabel Francisca (1851-1931), dos veces princesa de Asturias y conocida popularmente por “la Chata”. En la revolución de 1868 se denominó Olózaga, en los años treinta Blasco Ibáñez y recuperó su tradicional nombre de Princesa en 1941. (La actual calle del Duque de Liria se abre en terrenos de la desaparecida plaza de los Afligidos).
En esta calle se halla, como se ha dicho, el palacio de Liria. Y, en la misma acera, entre las calles de Mártires de Alcalá y Seminario de Nobles estuvo la famosa casa del Duende. A continuación, entre Seminario de Nobles y la calle de Serrano Jover se alzaba el Seminario de Nobles. En la esquina con Alberto Aguilera estuvo el barrio de Pozas, en el solar que ocupa hoy El Corte Inglés y el hotel Princesa Plaza. En la acera de enfrente se levantaba el hospital y la Iglesia del Buen Suceso, derribados en 1972 y ocupando su solar un enorme edificio de acero inoxidable con iglesia incluida. En el número 33 estuvo la casa donde vivió la escritora Emilia Pardo Bazán (1852-1921). Y en el número 49 vivió el escritor Emilio Carrere.