Asilo de San Bernardino
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El convento era de la orden descalza de San Pedro de Alcántara. Era conocido también como el convento de las Batuecas. Fue fundado por Francisco de Garnica, Contador Mayor de Felipe II en 1572. Estaba en el antiguo camino de San Bernardino (hoy Isaac Peral), fuera de la ciudad. La iglesia del convento era pequeña y sencilla.
Tras la exclaustración, el marqués viudo de Pontejos, en 1834, destinó el edificio a asilo para acoger mil pobres de ambos sexos financiado por suscripción voluntaria y del Ayuntamiento que aportaba 10.400 reales semanales. Además se instalaron talleres para que los allí acogidos pudieran trabajar. En 1842 se fusionó al Hospicio de San Fernando, denominándose a partir de entonces Primera Casa de Socorro. Posteriormente ambas instituciones se separaron pasando a depender del Ayuntamiento el primero y de la Diputación el segundo. En 1907, a consecuencia de la escasez de donativos de los que se mantenía y del lamentable estado en que se encontraba el edificio, el asilo se clausuró pasando el terreno a ser propiedad del duque de Granada. Los pobres fueron acogidos provisionalmente en unos locales municipales de la calle de Vallehermoso hasta que se construyó en 1910 el Asilo, Colegio y Talleres de Nuestra Señora de la Paloma (en la calle de Francos Rodríguez). Después de la guerra civil se edificó en su solar la Residencia de Profesores universitarios y el Pabellón de Gobierno de la Ciudad Universitaria.
