Calle de Calatrava
Entre la calle de Toledo y la plaza de San Francisco. En origen, el tramo de la actual calle de Calatrava comprendido entre la Carrera de San Francisco y la calle del Ángel se denominó calle de San Francisco hasta que en 1835 recibió el nombre de los Santos por un cuadro dedicado a San Francisco y Santo Domingo que había en una casa de la Venerable Orden de San Francisco situada en esta calle. Comprendía parte del antiguo campillo de San Francisco. Desde 1932 recibe el nombre de Calatrava como continuación de ésta. La calle de Santos desapareció con la construcción de la Gran Vía de San Francisco. En este lugar tuvo su quinta Mosén Romano, el opulento judío, contador mayor de Castilla y amigo de Enrique II a quien prestaba grandes sumas de dinero. Tras la expulsión de los judíos, los terrenos fueron adquiridos por don Luis Monroy de Calatrava, que construyó allí algunas casas, entre ellas su propia vivienda de la que tomó el nombre la calle.