Cementerio de San Ginés
Uno de los primeros cementerios construidos tras la prohibición de los enterramientos en las Iglesias ordenado por el rey José Bonaparte fue el Cementerio de la Sacramental de San Ginés y San Luis.
Su construcción data de 1831 y se encontraba fuera de la Puerta de Fuencarral, entre lo que hoy son las calles de Magallanes, Fernández de los Rios y Fernando el Católico.
En un principio contaba con un patio circundado de galerías con una capilla al frente, pero al irse quedando pequeño se fue ampliando y reformado en un gran rectángulo compuesto por dos galerías de nichos a los lados con un cuerpo saliente en cada galería. Esta ampliación se consagró el 8 de octubre de 1846.
Fue cerrado el 1 de septiembre de 1884, rescatándose algunos cuerpos como los de Bretón de los Herreros trasladado al Cementerio de San Justo y el de Juan Eugenio Hartzenbusch.
Se dice de él que era uno de los más bellos por su frondoso jardín, además de sus pabellones con columnas y una impresionante fachada.