Convento de San Felipe Neri
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De clérigos menores. En el año 1660 se fundó un oratorio dedicado a este santo en la plaza del Ángel. En 1769, tras la expulsión de los jesuitas, Carlos III concedió a los filipenses la iglesia que los jesuitas tenían en la calle Mayor a cambio de poder derribar su oratorio para poder ensanchar la plazuela del Ángel. La única condición que puso el rey fue que la iglesia siguiera dedicada a San Francisco Javier y que mantuvieran el cuerpo de dicho santo en el altar. El convento junto con la iglesia fue derribado con la desamortización de Mendizábal y en su lugar se construyó un mercado y el primer pasaje comercial cubierto de Madrid, denominado de San Felipe Neri. Desaparecidos el pasaje y el mercado se levantaron unas casas de viviendas.
