Hospital de los Cómicos
Desaparecido
Calle de Almadén esquina a Alameda. El origen del hospital se remonta a 1615 cuando el caballero florentino Carlos Veluti mandó pintar a la puerta de su casa una imagen de la Virgen. Ésta se denominó del Silencio porque detrás de la Virgen con el Niño en el regazo estaba San José y San Juan Bautista, este último con un dedo indicando silencio. Se cuenta que la actriz Catalina Flores, que debido a una enfermedad no podía andar sin muletas, hizo una novena a la Virgen del Silencio para que la sanara. Como se curó tras nueve visitas a la Virgen, la imagen pasó a ser la patrona de los cómicos y se fundó en 1767 el hospital de Nuestra Señora de la Novena o de los Cómicos. El hospital funcionó hasta 1855, año en que el edificio fue destinado al Asilo de Huérfanas de la Caridad.