Inclusa
En 1567 se estableció en el convento de la Victoria la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad y de las Angustias a la cual cedieron una capilla en la iglesia del citado convento. En 1572, el dinero sobrante de las limosnas se decidió emplearlo en la recogida de niños recién nacidos que se dejaban en los portales, escaleras de edificios, iglesias y demás lugares de Madrid.
Tras la reducción de hospitales decretada por Felipe II, la Inclusa se trasladó en 1587 a un lugar situado junto a la iglesia de San Luis y posteriormente a la Puerta del Sol, entre las calles del Carmen y Preciados. El origen del nombre inclusa lo tomó de una ciudad de Flandes llamada Enckussen, lugar de la cual un soldado trajo una imagen de la Virgen que se colocó en la capilla del asilo. El nombre de la Virgen pasó a denominar al edificio entero, y españolizándose quedó en Inclusa. En 1651 desapareció la cofradía y en 1799 se hizo cargo de la institución benéfica una Junta de Damas de honor y mérito. Un año más tarde la Inclusa se trasladó a la calle de Barbieri, entonces calle del Soldado, al edificio que sería ocupado más tarde por la cárcel de mujeres o Galera y posteriormente a la calle del Mesón de Paredes, a la parte trasera del colegio de Nuestra Señora de la Paz, con el que se unió. Entraban anualmente de mil a mil doscientos niños. A partir de 1840 la Inclusa pasó a depender de la Junta Superior de Beneficencia. Para guardar el anonimato de quienes abandonaban a los niños, tenían un torno donde éstos eran depositados.
El edificio, fue derribado en los años sesenta y sus ruinas permanecieron en pie muchos años. En su lugar se construyeron en varios edificios de viviendas y se inauguró, en 1973, un parque.
Cuando los niños cumplían siete años continuaban su educación en el colegio de los Niños Desamparados, fundado por la Congregación del Amor de Dios para acoger a los niños mayores de siete años. En 1769, la duquesa de Feria fundó el Colegio de Nuestra Señora de la Paz, para niñas huérfanas, a donde iban las niñas mayores de siete años de la Inclusa.
En la actualidad, la Inclusa se halla en la calle de O’Donnell esquina a Doctor Esquerdo.