Teléfonos (Artículo)
En Madrid las primeras experiencias telefónicas tuvieron lugar en enero de 1878 y sus protagonistas fueron el Gobierno y la Corona, enlazando el antiguo Casón de Telégrafos con el Ministerio de la Guerra y, posteriormente, los palacios reales de Madrid y Aranjuez. La implantación del teléfono en España fue lenta y complicada. Una demanda débil, una iniciativa privada con escasos recursos y una política gubernamental en cuanto a la legislación lo impidieron. La primera empresa española de gran envergadura fue la Compañía Peninsular de Teléfonos, que compró la Compañía Madrileña de Teléfonos en 1908.
En 1924 se produjo el despegue telefónico en España con la constitución de la Comañía Telefónica Nacional de España, la CTNE, filial de la multinacional norteamericana ITT. El nacimiento de esta compañía significó la constitución de un modelo telefónico basado en el monopolio, que se ha mantenido hasta 1998 con la aprobación de la Ley Orgánica de Telecomunicaciones (OT), que liberalizó el mercado telefónico. Antes de la Guerra Civil la utilización del teléfono en Madrid estaba circunscrita a las actividades gubernamentales, el mundo de la prensa, el de los negocios y los sectores profesionales, tal como ponen de manifiesto las guías telefónicas de la época. El proceso de socialización del teléfono marcó un lento recorrido que se prolonga hasta bien avanzados los años sesenta, cuando los aparatos telefónicos entran en los hogares de las nuevas clases medias. La universalización de su uso corresponde a los años setenta. En 1960 la red telefónica española contaba con un 1.779.314 teléfonos en servicio, cinco años después, con la entrada en funcionamiento de la red automática nacional, en la ruta Madrid-Zaragoza-Barcelona, y la red automática provincial, extendida a catorce provincias, entre ellas Madrid, el número de teléfonos instalados llegó a los 2.771.616, lo que representaba una media de 8,69 teléfonos por cada 100 habitantes. Por debajo de la media de Europa occidental.
En los años ochenta se dieron los primeros pasos, con la digitalización de la red, de la introducción de nuevos servicios, desde los pioneros sistemas de transmisión de datos iniciados con la creación de la red IBERPAC desde 1971, que apuntaron el nacimiento de la sociedad de la información, a caballo de la revolución de las telecomunicaciones registrada en el último tercio del siglo XX. Nuevos servicios desde el fax a Internet, pasando por los servicios de banca y comerciales, como los populares cajeros automáticos y el pago electrónico. El último lustro del siglo XX registró el nacimiento de la telefonía móvil, que en el año 2000 superó el número de clientes que la telefonía fija había logrado a lo largo de un siglo, asimismo se produjo la irrupción de nuevos operadores telefónicos, como Retevisión, Uni2 o Jazztel en el caso de la telefonía fija y Airtel -hoy Vodafone- y Amena -Retevisión- en la telefonía móvil.
Fuente de la primera versión: Artículo de la Madrid Siglo XX. Enciclopedia, autor Ángel Bahamonde Magro y Luis Enrique Otero Carvajal