Virgen de Antigua

La Virgen de Antigua o Nuestra Señora la Antigua era venerada en la iglesia del convento de Atocha, pero como competía en devoción con la imagen de la Virgen de Atocha, los dominicos la cambiaron de lugar pasándola de la capilla mayor a la sacristía, de aquí al dormitorio alto donde se rezaban los maitines de medianoche y por último, tras intentar sacarla tres veces para llevarla al Nuevo Mundo para que estuviese presente en la conversión de nuevos cristianos, las tres veces, la imagen volvió a su sitio, lo que se interpretó como milagro que no quería ser alejada de Madrid. Y fue trasladada al oratorio de la casa de los novicios.

Había otra imagen de igual nombre que se veneraba en la iglesia de San Nicolás.

Este artículo incorpora material del Diccionario Enciclopédico de Madrid, de María Isabel Gea, publicado por Ediciones La Librería, autorizada su inclusión en Madripedia bajo licencia Reconocimento-CompartirIgual