Cárcel de Carabanchel
La cárcel de Carabanchel es una cárcel que fue edificada por el régimen franquista con el objetivo de encarcelar a sus opositores políticos. Estuvo en funcionamiento 55 años. Se encuentra situada en el distrito de Carabanchel, entre la línea 5 del Metro de Madrid (que transcurre en superficie) y la Avenida de los Poblados.
Apenas terminada la Guerra Civil, y con la anterior cárcel de Madrid, la Modelo, prácticamente destruida por haber estado en la línea del frente, el dictador Francisco Franco decidió construir una nueva cárcel (hasta la finalización de las obras, los presos políticos del franquismo se hacinaban en la cárcel de Porlier). A tal efecto, el 16 de enero de 1940 se adquirieron unos terrenos de unos 200.000 metros cuadrados en el municipio de Carabanchel Alto (entonces un pueblo en las afueras de Madrid), pertenecientes a José Messía y Stuart, duque de Tamames y de Galisteo. El precio fue de 5,25 pesetas por metro cuadrado. En total, el Estado pagó unas 700.000 pesetas (unos 4.200 €)
Las obras empezaron el 20 de abril de 1940 y fueron llevadas a cabo por unos 1.000 presos políticos sometidos a trabajos forzados. La cárcel fue inaugurada el 22 de junio de 1944 por el ministro de Justicia, el falangista Eduardo Aunós. Según la noticia aparecida en la revista Redención, la cárcel era "un modelo en las de su clase, con capacidad para 2.000 reclusos". Poco después ingresaban los primeros ocupantes de la prisión. No obstante, las obras prosiguieron durante años, e incluso una de sus galerías no llegó a terminarse nunca. Al crecer la ciudad de Madrid (que se anexionó los municipios limítrofes, entre ellos Carabanchel Alto, en 1948) la ciudad quedó en su interior (el suburbano, posteriormente metro, pasaba a sus pies, entre las estaciones de Aluche y Carabanchel).
La cárcel tenía cuatro galerías y no siete (la tercera, la quinta, la sexta y la séptima).
Durante la dictadura, la cárcel de Carabanchel fue la última morada de muchos ajusticiados, como José María Jarabo, acusado de cuatro asesinatos, que fue ejecutado, mediante garrote vil el 4 de julio de 1959. También sufrieron el mismo método de ajusticiamento en 1963 los anarquistas Francisco Granados Gata y Joaquín Delgado Martínez. En 1975, Xosé Humberto Baena Alonso, José Luis Sánchez Bravo y Ramón García Sanz, miembros del FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriota) condenados a muerte, pasaron aquí sus últimas horas, antes de ser ejecutados en Hoyo de Manzanares, en las que serían las últimas ejecuciones del franquismo. También estuvieron encarcelados aquí, en la sexta galería (destinada a presos políticos), numerosos opositores a la dictadura, como Marcelino Camacho, dirigente de Comisiones Obreras.
Durante los últimos años del régimen franquista y primeros de la transición, Carabanchel fue testigo de diversos motines promovidos por la Coordinadora de Presos en Lucha (COPEL) que reclamaba amnistía y reforma del código penal como bandera de lo que en realidad no era más que un grupo organizado de extorsión y control interno de la prisión por parte de los mismos presos. El 18 de julio de 1977, reclusos agrupados de la COPEL, tomaron los tejados de la prisión para hacer visible su lucha y reivindicaciones mientras aprovechaban para afianzar su control sobre el resto de reclusos. En 1978, el preso Agustín Rueda, miembro de la COPEL murió a consecuencia de una paliza.
Dejó de utilizarse en 1999. En aquella fecha, la cárcel albergaba a 2.000 hombres y 500 mujeres (las presas fueron las últimas en abandonar la cárcel). En la actualidad se encuentra abandonada. Parte del recinto ha sido destinado a comisaría de policía y centro de internamiento de inmmigrantes, pero el resto del solar (172.000 metros cuadrados) siguen ocupados por la cárcel. Los vecinos de la zona reclaman que en el solar se construya un hospital y servicios sociales para el barrio.
Enlaces externos[ ]
- Regreso al purgatorio, reportaje del diario El País, 15 de octubre de 2006.
- Cárcel de Carabanchel, Grupo de usuarios del portal flickr.com, donde encontrar un recorrido fotográfico por el estado actual de abandono de la cárcel e información varia sobre la misma.