Museo de San Isidro
El Museo de San Isidro, oficialmente desde 2007 Museo de los Orígenes. Casa de San Isidro es un museo de la ciudad de Madrid, propiedad de su Ayuntamiento. Forma parte, junto con la ermita de San Antonio de la Florida, el Templo de Debod, el Museo Arte Público (antiguo Museo de la Castellana), el Museo de Historia (antiguo Museo Municipal), el Museo de la Ciudad, el Museo Municipal de Bomberos y el Museo de Arte Contemporáneo (situado en el Cuartel del Conde Duque) del conjunto de Museos Municipales de Madrid.
El museo fue inaugurado el 15 de mayo de 2000 por el entonces alcalde de Madrid José María Álvarez del Manzano.
La colección permanente procede en su mayor parte del desaparecido Instituto Arqueológico y del Museo Municipal. Muestra la historia de la ciudad desde la prehistoria hasta el establecimiento de la Corte a través de piezas arqueológicas, maquetas y grabados.
El edificio[ ]
El edificio, la denominada Casa de San Isidro, es fruto de la reconstrucción llevada a cabo por el Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento. La original fue demolida en 1972 debido a su mal estado. Se trataba de un palacio del siglo XVI propiedad de la familia Lujanes, levantado sobre el palacio de los Vargas, patrones de San Isidro y Santa María de la Cabeza. Posteriormente, el palacio fue ocupado por el Nuncio Apostólico tras el traslado de la Corte a Madrid. Después, y hasta el siglo XIX, el palacio perteneció al conde de Paredes y más tarde del marqués de Peñafuente. En 1986 fue adquirido por el Ayuntamiento de Madrid.
Valentín Quintas Ripoll llevó a cabo el proyecto integrando elementos originales, como la capilla de San Isidro (levantada en el siglo XVI en el lugar dónde según la tradición vivió y murió el santo), el pozo dónde cayó el hijo de San Isidro, del cual fue salvado por la oración del santo, o el patio, con los escudos de la familia Lujanes.
La capilla se levantó sobre las habitaciones que ocupó el santo. Robello y Vasconi lo relata en estos versos:
Levantada la capilla en el año 1608, fue reformada en 1663 y después de nuevo entre 1783 y 1789, época de la que data la decoración actual. Las pinturas murales que cubren las bóvedas fueron realizadas por Zacarías González Velázquez. El óvalo central representa la apoteosis de San Isidro, y en la bóveda de la nave aparecen dos ángeles que sostienen una corona de laurel mientras otros dos presentan una banda con la inscripción: Hice dormivit in domino (aquí durmió en el Señor), aludiendo a la tradición según la cual el santo murió en este lugar. El retablo es del siglo XVIII de madera pintada imitando mármol. Un arco de punto alberga una escultura de madera policromada que se encuentra en la capilla desde el año 1663
Además del pozo y la capilla, merece destacar la reconstrucción del patio renacentista del siglo XVI, que fue desmontado, por la ruina del edificio y del que se ha reconstruido en parte siendo una pieza única junto al del patio del Colegio Imperial en la calle Toledo, con una perspectiva muy interesante desde sus galerías, y un bello jardín en el centro.