Hipódromos

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El primero que hubo en tiempos de Isabel II estuvo en la Casa de Campo, el cual, pasó en 1846 a un terreno de Chamberí, en el antiguo paseo del Huevo, hoy calle de Almagro, situado fuera del portillo de Santa Bárbara. En 1878 se trasladó al lugar donde hoy se ubican los Nuevos Ministerios. Este nuevo hipódromo fue construido por el ingeniero Francisco Boquerín. El recinto estaba rodeado de un camino arbolado -el llamado paseo del Hipódromo-. Aquellos que no podían pagar la entrada al hipódromo veían las carreras" desde lo que se llamó el "tendido de los sastres, situado en los "altos del Hipódromo", junto al edificio del Museo de Ciencias Naturales. En los años noventa del siglo XIX la Sociedad de Carreras (luego Real Sociedad Hípica Española) cedió un gran trozo de los terrenos del hipódromo al Polo-Club, al Campo de Tenis y al Real Club de Golf. En 1916, Núñez Granés, director de Vías Publicas del Ayuntamiento, propuso la creación, en este lugar, de una plaza circular de doscientos cincuenta metros de diámetro, integrada en un plan global para la prolongación del paseo de la Castellana en cuyo centro se colocaría un monumento dedicado a Alfonso XIII a caballo. En 1927 surgió la idea de construir un Club de Campo que abarcase las distintas especialidades deportivas del hipódromo de la Castellana: golf, tenis, hípica, polo, etc. Para ello el rey Alfonso XIII cedió unos terrenos en la Casa de Campo inaugurándose en 1931 la Real Sociedad Hípica Club de Campo. El hipódromo de la Castellana se clausuró en 1930 y fue derribado dos años más tarde. En 1936 comenzó la construcción del hipódromo de la Zarzuela, cuyas obras finalizaron en 1941. Zarzuela es diminutivo de zarza y por el norte del hipódromo pasa el arroyo de la zarzuela, -o de las zarzas pequeñas- de ahí el nombre del lugar y del hipódromo. El hipódromo de la Zarzuela es obra de los arquitectos Carlos Arniches y Martín Domínguez y el ingeniero Eduardo Torroja. Destaca la cubierta laminada de hormigón de la tribuna sin ninguna sujeción en su parte frontal que realizó Torroja. El hipódromo estuvo varios años cerrado y en grave estado de deterioro. Posteriormente fue restaurado y en la actualidad (2012) funciona normalmente.


Este artículo incorpora material del Diccionario Enciclopédico de Madrid, de María Isabel Gea, publicado por Ediciones La Librería, autorizada su inclusión en Madripedia bajo licencia Reconocimento-CompartirIgual